¿Conoces dónde se ubican los contenedores de basura?
Existe un elemento por excelencia en las vías públicas y ese no es otro que los contenedores de basura. Ya sean en pequeño o gran tamaño, son indispensables para poder llevar a cabo una buena gestión de los residuos que depositamos en ellos.
Pero puede que no te hayas parado a pensar los tipos de contenedores que podemos encontrarnos o el método que se utiliza en las poblaciones para colocarlos. ¡Vamos a descubrirlo!
¿Qué tipos de contenedores podemos encontrar?
Gracias a la gran concienciación que existe actualmente en nuestro país, podemos encontrar múltiples variedades de contenedores donde tirar las bolsas de basura que previamente en nuestro hogar hemos ido separando mediante las normas de reciclaje.
Los contenedores se han vuelto, con el aumento de la población, sobre todo en las grandes ciudades, una pieza fundamental para mantener la limpieza y salubridad de nuestro entorno.
Como ya hemos visto en artículos anteriores, los contenedores de residuos urbanos más populares son el contenedor amarillo para los envases de plástico, briks y latas.
El contenedor verde para el vidrio, el contenedor azul para papel y cartón, el contenedor marrón para orgánico y el gris para otros restos.
Pero es verdad que hoy en día existen dos tipos de contenedores desconocidos para gran parte de la sociedad.
Estos tienen un peso importante, pues existen matices que las ordenanzas municipales establecen a la hora de realizar la recogida de residuos, estos son:
- Contenedores de ropa y pilas. Cada vez en más municipios es posible encontrar en la calle estos tipos de contenedores.
- Punto limpio. Habilitados en recintos donde se arrojan residuos peligrosos, electrónicos, neumáticos, aceites, residuos de construcciones, ropa…
¿Qué criterios se utilizan para ubicar los contenedores?
Los contenedores junto con el resto de mobiliario de la vía pública son responsabilidad de cada uno de los ayuntamientos de las poblaciones. Eso no quiere decir que la ciudadanía no tenga la responsabilidad de cuidar de ello, pues no debemos dañarlos, cambiarlos de ubicación ni realizar malas prácticas de reciclaje.
Como comentábamos al inicio del artículo, existen una serie de pautas a la hora de implantar y ubicar los contenedores en las poblaciones:
- Generación de RSU por cada zona. Los contenedores soterrados para residuos urbanos han de ser colocados en proporción a la cantidad de residuos que se generan por zona. Esto tiene como objetivo eliminar el gran inconveniente de la saturación de depósitos de basura y facilitar así el servicio de recogida.
- Detección de obstáculos que interfieren. Consiste en examinar los impedimentos u obstáculos en calles o avenidas que imposibilitan la instalación de contenedores.
- Características físicas de las calles. Si la calle tiene pendiente, si es estrecha o si existen árboles son algunas de las particularidades que los técnicos estudian para habilitar correctamente los contenedores.
- Instalación en zonas visibles a los ciudadanos. Es importante además la proximidad entre los contenedores y los ciudadanos, cuantas más dificultades existan, más difícil tendrá la población efectuar una mejor gestión de sus residuos.
Más contenedores es igual a más reciclaje
Gracias a los datos ofrecidos desde Ecoembes respecto al año pasado, vemos como la implementación de contenedores amarillos y azules se ha ido incrementando con los años. Tanto es así, que en 2022 teníamos repartidos por todo el país 243.399 contenedores azules y 388.747 contenedores azules.
Implementar esta serie de medidas no solo sirve para nuestro presente, sino que futuras generaciones crecerán ya con estos hábitos de conducta, facilitando de esta manera que el reciclaje de residuos aumente y con ello mejore la salud de nuestro planeta.
¡Reciclar es cada día mucho más fácil gracias a los contenedores!