Biotransformación, el potencial silencioso de la naturaleza
La biotransformación hace referencia al proceso natural, mediante el cual los organismos vivos alteran la estructura química de determinadas sustancias.
Estos organismos, como por ejemplo las plantas, actúan a través de la transformación química, facilitando la eliminación de la sustancia o convirtiéndola en un compuesto más fácil de utilizar. Esto abre un mundo de posibilidades para enfrentar desafíos ambientales actuales.
Explorando la biotransformación y su importancia
La biotransformación incluye cambios químicos en una sustancia por la acción de organismos vivos. Este fenómeno natural tiene aplicaciones poco conocidas en áreas como la producción de energía renovable, el tratamiento de residuos o el desarrollo de productos farmacéuticos más seguros.
Además de ayudarnos en determinados problemas ambientales, podríamos decir que la biotransformación realiza una función promotora de la economía circular. Ya que ayuda a convertir desechos en recursos de valor.
Aplicaciones en el tratamiento de residuos
Uno de los usos más sorprendentes de la biotransformación es el del tratamiento de residuos, donde microorganismos y organismos superiores participan en la degradación y transformación de compuestos químicos.
Gracias a estas formas de vida, se pueden descomponer materiales que de otra forma serían difíciles de reciclar o eliminar, algunos como los plásticos y determinados productos químicos tóxicos que se encuentran en la naturaleza.
La descomposición microbiológica transforma los residuos en compuestos más simples que pueden reintegrarse en el ciclo natural, reduciendo así la contaminación y la acumulación de desechos.
En algunos casos se pueden usar organismos vivos como la mosca soldado negro, que ha demostrado una alta eficiencia en el aprovechamiento de residuos urbanos u otro ejemplo es el de las bolsas de plástico de polymateria, que al contacto con el sol, aire y humedad se degradan y descomponen.
Enzimas y energía renovable
La energía renovable también se favorece de la biotransformación, ya que posibilita la producción de energía mediante procesos como la digestión anaerobia.
En estos procesos, los microorganismos descomponen materia orgánica, produciendo biogás, una fuente de energía limpia y renovable, que podemos plantearlos como una alternativa de desarrollo a los tradicionales y finitos combustibles fósiles.
Además, también ayuda a gestionar residuos orgánicos, como restos de comida y desechos agrícolas, de manera más eficiente y ecológica, reduciendo el desperdicio de alimentos y fomentando el uso de biocombustibles.
La biotransformación en la farmacología
Otra industria que se ha visto favorecida es la farmacocinética, una rama crucial de la farmacología, que se dedica al estudio de los procesos que un fármaco experimenta al atravesar el organismo.
La biotransformación implica una serie de transformaciones químicas que los fármacos experimentan, especialmente en el hígado, con el objetivo de facilitar su eliminación del cuerpo.
En el sector farmacológico, la biotransformación es indispensable para desarrollar medicamentos más seguros y efectivos. Usualmente los organismos vivos se utilizan para modificar químicamente los compuestos farmacéuticos, ayudando en su absorción, distribución, metabolismo y excreción.
Mediante esta técnica se crean medicamentos que son más amigables con el cuerpo humano y reducen los efectos secundarios adversos.
El futuro inmediato de la biotransformación
A día de hoy, la necesidad de condiciones específicas para el crecimiento de los microorganismos y una reducida escala de producción, son algunas de las barreras que tiene que superar la biotransformación para llegar a ser una opción consolidada a nivel general.
Es probable que, a través de la investigación continua y el desarrollo tecnológico, estas barreras continúen disminuyendo en el tiempo, generando nuevas oportunidades para poder llegar al siguiente nivel de adopción.
Podríamos decir que la biotransformación, puede llegar a convertirse en una herramienta poderosa para luchar contra problemas ambientales y dejar de ser un simple proceso biológico.