Contaminación marina: descubre sus causas y efectos en el medioambiente

La contaminación marina es un problema que se ha acrecentado en los últimos tiempos, lo cual tiene un impacto devastador en los ecosistemas y su sostenibilidad. Cada año se introducen 13 millones de toneladas de plástico en mares y océanos y se estima que la cifra podría duplicarse en el año 2050.
Conocer las causas y efectos de la contaminación marina es esencial para tomar conciencia y adoptar medidas para proteger un bien esencial para la vida en la Tierra.
¿Qué es la contaminación marina?
Con base en la Ley 41/2010, de 29 de diciembre, de protección del medio marino, la RAE define la contaminación marina de la siguiente manera:
Introducción directa o indirecta en el medio marino de sustancias o energías como consecuencia de la actividad humana, incluidas las fuentes sonoras submarinas, que provocan o pueden provocar efectos nocivos, como perjuicios a los recursos vivos y a los ecosistemas marinos —incluida la pérdida de biodiversidad—, riesgos para la salud humana, obstáculos a las actividades marítimas, especialmente a la pesca, al turismo, a las actividades de ocio y demás usos permitidos del mar, así como alteraciones de la calidad de las aguas marinas que limitan su utilización y una reducción de su valor recreativo, o en términos generales un menoscabo del uso sostenible de los bienes y servicios marinos, incluidos sus recursos.
Teniendo en cuenta esta definición, podemos decir de la contaminación marina que es cualquier modificación química, biológica o física que altera la calidad del agua del mar en todos sus contextos y que, por tanto, provoca un efecto perjudicial en quienes la consumen.
Cuando hablamos de contaminación marina nos referimos a la introducción de sustancias o elementos que no deberían estar en el agua del mar y que afectan al equilibrio de sus ecosistemas.
Causas de la contaminación marina
El principal factor de contaminación marina es la actividad humana. También hay factores naturales que pueden contaminar océanos y mares, pero, fundamentalmente, las causas de la contaminación marina son:
- El calentamiento global, ya que el aumento de la temperatura terrestre debido a las emisiones de CO2 calienta el agua y hace que disminuya su nivel de oxígeno.
- La deforestación de los bosques puede agotar las fuentes hídricas y genera residuos orgánicos en los que se originan bacterias contaminantes.
- Las actividades industriales, agrícolas y ganaderas, cuyos vertidos químicos son una de las principales causas de la contaminación del agua.
- Las basuras y vertidos de aguas fecales, que llegan sin depurar al mar.
- El tráfico marino, pues de los barcos pesqueros, petroleros y transportes de mercancías marítimos procede la mayor parte de los plásticos que contaminan los océanos.
- El derrame de combustible, procedente tanto del transporte como del almacenamiento de petróleo y de sus derivados.
Plaguicidas, fertilizantes, detergentes, aguas residuales, hidrocarburos y, sobre todo, plásticos son los principales contaminantes de mares y océanos. Pero no son los únicos, pues se están incrementando las nuevas amenazas y peligros para nuestros mares y los seres que los habitan.
Contaminación marina por plásticos: un problema global
Existe un amplio abanico de contaminantes que afecta a los ecosistemas marinos. Muchos de esos contaminantes se acumulan en las profundidades de los océanos y son ingeridos por pequeños organismos marinos, a través de los cuales se introducen en la cadena alimentaria global.
Uno de los principales problemas que se originan en mares y océanos es la introducción de plásticos y microplásticos, que llegan a través de las aguas residuales, las escorrentías o llevados por el viento. De hecho, se estima que un 98% de los microplásticos primarios que acaban en los océanos tiene su origen en actividades terrestres y solo el 2% restante tiene que ver con actividades que se realizan en el mar.
El plástico es, sin duda, uno de los mayores peligros para el medio marino, pues tiene un ritmo muy lento de degradación. Además, representa en torno al 85% del total de los residuos que se encuentran en este medio, según la ONU.
El plástico no se degrada, sino que se descompone en microplásticos y nanoplásticos a lo largo de cientos o miles de años, afectando negativamente a los ecosistemas marinos, ya que estos residuos se introducen en la cadena trófica de los seres vivos.
Por tanto, la contaminación marina por plásticos es un problema que tiene un impacto a muchas escalas, pues en el mar no hay fronteras y las corrientes marinas desplazan los residuos a lugares remotos.
Tipos de contaminación marina
Podemos distinguir distintos tipos de contaminación marina que alteran el ecosistema, como pueden ser la contaminación química, biológica, acústica, lumínica o por plásticos.
Contaminación química
La contaminación química consiste en la introducción de contaminantes nocivos en los mares, generalmente de origen humano, como pueden ser pesticidas, herbicidas, detergentes, petróleo, productos químicos industriales o aguas residuales.
Incluso los productos farmacéuticos que ingerimos los seres humanos y que no son procesados completamente por nuestro organismo acaban en redes tróficas acuáticas.
Estos contaminantes se liberan en el medioambiente en aguas del interior, lejos de las costas, pero acaban llegando a mares y océanos de una manera u otra.
Algunos de estos agentes contaminantes químicos viajan por la cadena alimenticia hasta los humanos, por lo que suponen un riesgo para la salud pública.
Contaminación biológica
La contaminación biológica de las aguas es causada, principalmente, por la presencia de excrementos humanos o de origen animal y está asociada a la rápida urbanización y a la falta de tratamiento de las aguas fecales.
Los contaminantes biológicos suelen estar ligados a actividades que aumentan la presencia de nutrientes en el agua, lo cual provoca un desequilibrio importante en los ecosistemas acuáticos, con la consiguiente aparición de enfermedades.
En esos contaminantes biológicos proliferan organismos patógenos capaces de causar alergias, diarrea, tifus o cólera, entre otras afecciones.
Por tanto, este tipo de contaminación marina también puede tener efectos negativos en la salud humana, causando incluso nuevas enfermedades infecciosas.
Contaminación por ruido
La contaminación marina no siempre es visible. Es el caso de la contaminación acústica, originada por la presencia cada vez mayor de sonidos fuertes o persistentes procedentes de buques, dispositivos sonar y plataformas petrolíferas.
En grandes masas de agua, las ondas sonoras se pueden propagar a lo largo de kilómetros y kilómetros sin disminuir, lo cual perturba los ruidos naturales del medio marino.
Esos ruidos no naturales interrumpen la comunicación de muchos mamíferos marinos, como las ballenas o los delfines, lo cual interfiere en sus patrones de migración, caza y reproducción.
Efectos de la contaminación marina en el medioambiente
La contaminación marina y el deterioro de la calidad del agua tiene efectos muy negativos para la salud, el medioambiente e incluso la economía global. ¿Cuáles son las principales consecuencias de la contaminación marina?
- Pérdida de biodiversidad acuática, pues miles de especies están en peligro por la degradación de sus hábitats y la presencia de plásticos y microplásticos.
- Contaminación de la cadena alimentaria, pues actividades como la pesca, la agricultura o la ganadería pueden contribuir a la transmisión de toxinas a los alimentos que son perjudiciales para la salud humana y de otros seres vivos.
- Alteración de los ecosistemas, lo cual tiene diversos y enormes impactos en el medio marino.
- Escasez de agua potable, pues esa agua contaminada deja de ser apta para el consumo humano, lo cual es un problema que se incrementa en las zonas rurales.
- Problemas para la salud pública, ya que el consumo de esa agua contaminada nos expone a la propagación de enfermedades.
- Aumento de la mortalidad infantil, debido a enfermedades diarreicas que, por esa falta de higiene, causan la muerte a cientos de niños cada día en todo el mundo.
Además, la contaminación marina también tiene un fuerte impacto en la economía, especialmente en sectores como la pesca, la agricultura o el turismo.
¿Qué podemos hacer para reducir la contaminación marina?
La contaminación marina afecta tanto a países ricos como a países pobres. De hecho, se calcula que la mitad de los habitantes del planeta vive en zonas con escasez de agua. Esto significa que el agua contaminada pone en peligro el futuro de todos y, por tanto, es responsabilidad de cada uno de nosotros tomar medidas para evitar la contaminación marina. ¿Qué podemos hacer para reducir sus efectos?
- Reducir el uso y consumo de plásticos, promoviendo los envases alternativos y lanzando campañas de concienciación sobre reciclaje.
- Hacer un tratamiento adecuado de las aguas residuales por parte de los ayuntamientos.
- Implementar políticas y normativas que limiten los vertidos y aplicar esas leyes de manera rigurosa.
- Concienciar a la población de la necesidad de adoptar prácticas sostenibles y responsables.
- Fomentar mejores prácticas ganaderas e industriales para reducir el uso de fertilizantes y pesticidas y hacer un mejor uso del suelo.
- Fomentar la pesca sostenible para garantizar la supervivencia de las especies y evitar el empobrecimiento de mares y océanos.
Aunque muchas de estas medidas son más genéricas, los propios ciudadanos podemos adoptar hábitos más responsables con el medioambiente. La simple concienciación de la importancia del reciclaje en la playa puede contribuir al objetivo de reducir la contaminación marina.
Proyectos como UpcyclingTheOceans, liderado por la Fundación Ecoalf y en colaboración con Ecoembes, buscan preservar los ecosistemas marinos y su biodiversidad. Esta iniciativa tiene por objetivo recoger los residuos de los fondos marinos para transformarlos y darles una segunda vida. Acabar con la basura en el mar con la colaboración de los pescadores permite conservar nuestros océanos y apostar por el futuro del planeta.