¿Dónde se tiran los vapers? Una guía completa para el reciclaje responsable

El vaper, vapeador o POD es un objeto que durante los últimos años se ha ido implantando en la población hasta convertirse en un objeto de consumo diario para muchas personas. El vapeo es una forma de fumar de manera sustitutiva al tabaco. El usuario puede utilizarlo para dejar de fumar de manera paulatina, ya que se elige la cantidad de nicotina que quieres que lleve o incluso que no tenga.
Este modelo de cigarro electrónico tiene origen en el siglo pasado, en 1963. Pero no fue hasta 2004 que se lanzó al mercado para los consumidores y hasta 2014 que se empezó a popularizar de forma más notable. Y esta popularidad ha generado un nuevo desafío: ¿qué hacer con estos dispositivos una vez que llegan al final de su vida útil?
Su composición y el ciclo de vida de sus componentes los convierten en un problema para el medioambiente si no se gestionan de manera adecuada. La composición de los vapers es compleja, incluyendo una batería de litio, plástico, metales y líquidos. Estos componentes, si son desechados de manera incorrecta, contaminan suelos y aguas, liberando sustancias tóxicas, además, la gestión inadecuada de las baterías de litio puede provocar incendios y explosiones.
Tipos de vapers y sus características
- Los vapers de resistencia reparable. Este tipo de vapeadores como su nombre indica funcionan con una resistencia que es reparable. Pero ¿qué es una resistencia? Una resistencia en un vaper es el pilar del vapeo, ya que se encarga de calentar el algodón que lleva dentro para generar el vapor.
De esta forma, las resistencias reparables, aunque son más difíciles de instalar, te permiten personalizar más tu vapeo, así como alargar la vida útil que pueda tener tu vaper con tan solo cambiar la resistencia. La duración de una resistencia es larga, ya que hay que cambiarla cada 1 o 3 meses dependiendo del uso.
Además, este tipo de vapers funcionan con baterías externas, por lo que si se les da un buen uso pueden durar bastante tiempo. Por otro lado, son baterías de ion de litio que duran alrededor de dos años, pasado ese tiempo habría que llevar las baterías a un punto limpio para reciclarlas.
- Los vapers de resistencia comercial. Estos vapeadores funcionan de manera parecida a los anteriores. Lo que los diferencia es el tipo de resistencia que utilizan, como indica también su nombre, este tipo de vapers utilizan resistencias comerciales. Las resistencias comerciales son mucho más fáciles de usar, ya que están planteadas como resistencias de quita y pon. También cambia su duración de uso, reduciéndose a alrededor de una semana dependiendo del uso que le demos.
Este tipo de vapers son más sencillos de usar que los de resistencias reparables, aunque tienen la desventaja de generar más residuos y que tienen un gasto más elevado de resistencias. Además, al igual que los anteriores estos también funcionan con baterías externas.
- Cigarrillos electrónicos recargables. Están diseñados con un tamaño muy pequeño para que sean fáciles de transportar y utilizar. Este tipo de vapers, como su funcionan con una batería que es recargable, por lo que son reutilizables. Aunque la vida útil de la batería de estos aparatos dura entre un año y medio y dos años.
Pasado este tiempo la batería empieza a fallar y su duración se reduce notablemente. Esta es la señal que necesitamos para saber que hay que llevarlo a una tienda especializada, o en su defecto, al punto limpio, para que lo reciclen.
- Cigarrillos electrónicos desechables. Están diseñados para optimizar su uso y transporte. La diferencia es que estos tienen un número limitado de usos, que, tras superarlos, hay que desecharlos. Pero hay que tener en cuenta que como otros aparatos de vapeo estos funcionan con baterías de iones de litio y al igual que las pilas no se tiran a la basura tampoco puedes tirar un vaper desechable.
Estos vapers después de separarlos del plástico que los envuelven deberían ser tratados al igual que una pila en el proceso de reciclaje.
¿Son reciclables los vapers?
Los vapers desechables están compuestos principalmente por un cartucho que contiene el líquido con sabor, una batería que alimenta el dispositivo y un atomizador que calienta el líquido. Al finalizar su vida útil, tanto el cartucho como la batería requieren un manejo especial para evitar contaminar el medioambiente.
Nunca debemos tirar el vaper a la basura común de casa, a un contenedor y mucho menos arrojarlo al suelo o en un entorno natural.
La batería de litio que contienen es un componente altamente contaminante y debe reciclarse de manera adecuada.
Cómo reducir el impacto ambiental de los vapers
Para reducir el impacto ambiental de los vapers, hay que adoptar hábitos responsables. Optar por vapers de resistencia reparable o recargables ayuda a generar menos residuos, al permitir reemplazando únicamente los componentes dañados. Un mantenimiento adecuado, como la limpieza regular de los dispositivos y el reemplazo oportuno de cartuchos o depósitos vacíos, prolonga su vida útil.
El reciclaje de las baterías de ion de litio es un punto muy importante, ya que estas contienen materiales altamente contaminantes. Hay que depositarlas en los puntos de recogida específicos. Las resistencias, cartuchos y otros componentes desechables también pueden ser reciclados si se separan correctamente.
Para asegurar un reciclaje adecuado, es importante seguir las instrucciones del fabricante y depositar los vapers y sus componentes en los puntos de recogida habilitados. La reutilización y el reciclaje responsable son acciones que minimizan el impacto ambiental de los vapers.
Proceso de reciclaje de los vapers
El reciclaje de los vapers es un proceso que requiere de una gestión especializada. Las baterías de ion de litio, por ejemplo, contienen materiales valiosos que son recuperados y reutilizados. Pero, también pueden ser peligrosas si no se manipulan correctamente. No hay que manipular el vaper, tratar de abrirlo o entrar en contacto con los componentes internos, si no es desmontable de origen.
Los vapers utilizan cartuchos o cápsulas que contienen el líquido saborizado y, en algunos casos, nicotina. Estos componentes, una vez vacíos, se reciclan. Si el cartucho está hecho de plástico, debe depositarse en el contenedor amarillo junto con otros envases de plástico.
Por otro lado, si el envase del líquido es de vidrio, este debe colocarse en el contenedor verde destinado al vidrio. Recuerda que tanto los cartuchos como los envases deben estar limpios y vacíos antes de ser reciclados.
Las resistencias también se reciclan, aunque el proceso es más complejo. En algunos casos, es posible separar los diferentes materiales que componen la resistencia y reciclarlos por separado.
Dónde llevar tus vapers y accesorios usados
Para asegurar un reciclaje adecuado de los vapers y sus componentes, lo mejor es llevarlos a puntos de recogida específicos. Muchas tiendas de vapeo y algunos estancos cuentan con contenedores destinados a este fin y también distribuidores. Asimismo, los puntos limpios municipales, donde se gestionan diversos tipos de residuos, suelen aceptar vapers usados.
Consejos para una elección sostenible de vapers
Si estás pensando en adquirir un nuevo vaper, te recomendamos tener en cuenta los siguientes consejos.
- Prioriza los modelos reparables y recargables. Estos dispositivos tienen una menor huella ambiental que los desechables.
- Elige líquidos electrónicos con envases reciclables. Busca líquidos electrónicos que se vendan en botellas de vidrio o plástico reciclable.
- Infórmate sobre las marcas y sus políticas de sostenibilidad. Investiga qué marcas ofrecen programas de reciclaje y utilizan materiales sostenibles en la fabricación de sus productos.
- Reduce el consumo de vapers desechables. Si utilizas vapers desechables, trata de reducir su consumo al mínimo y reciclarlos correctamente.
- Infórmate sobre las opciones de reciclaje disponibles en tu zona. Antes de comprar un vaper, investiga dónde puedes reciclarlo una vez que haya llegado al final de su vida útil.
Los fabricantes y distribuidores de vapers tienen un gran peso en la gestión sostenible de estos productos. Algunas empresas han comenzado a implementar programas de recogida y reciclaje de sus dispositivos, incentivando a los consumidores a devolver los vapers usados.
Varias marcas y fabricantes han creado programas para el reciclaje de vapers. Hay marcas que ofrecen descuentos en futuras compras como incentivo, mientras que otros regalan productos nuevos a cambio de los dispositivos usados. Por ejemplo, Greenery premia a sus clientes con un 5% de descuento por cada pod desechable o cartucho recargable que devuelvan. O Blo Bar en Reino Unido, que ofrece un vaper gratis a quienes envíen 10 vapers usados.