Todo lo que debes saber sobre dónde tirar electrodomésticos
Cuando algo nos deja de funcionar, lo primero que pensamos es en tirarlo a la basura, pero ¡ojo! ¿A qué contenedor debería ir? Conocer el lugar adecuado sobre dónde tirar electrodomésticos es vital para cuidar el medio ambiente y no mezclarlos con el resto de residuos.
Los RAEE o basura electrónica pueden contener sustancias peligrosas y gases que agotan la capa de ozono o que afectan al calentamiento global y pueden ser perjudiciales para la salud humana. Por eso, el punto limpio es el mejor lugar para este tipo de residuos domésticos.
Electrónico o eléctrico
Aunque ambos se tiran en el punto limpio, es interesante saber que los dispositivos electrónicos no son los mismos que los eléctricos, y por eso, los residuos electrónicos que se crean después de usar un aparato son diferentes a los eléctricos.
Los eléctricos son aquellas máquinas que necesitan estar enchufados para cumplir su cometido. Por otra parte, los electrónicos son los que utilizan las corrientes eléctricas para realizar operaciones más complicadas como un portátil o una tablet.
En 2019 un total de 123.556 toneladas de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) fueron recogidos el año pasado de forma selectiva y gestionados correctamente para su reciclaje.
Las 7 categorías de AEE (Aparatos electrónicos y eléctricos)
Los aparatos eléctricos y electrónicos se dividen en función de su uso y de sus características.
1. Pequeños aparatos
La dimensión exterior de los pequeños aparatos no puede separar los 50 cm. Es la categoría de la que podríamos dar más ejemplos: desde aparatos para la cocina como hervidores eléctricos hasta para el aseo personal como maquinillas de afeitar eléctricas, básculas, aparatos para el cuidado del pelo y el cuerpo. También se clasifican en esta categoría aparatos de radio, cámaras, aparatos de grabación de vídeo, cadenas de alta fidelidad, instrumentos musicales, aparatos de reproducción de sonido o imagen, juguetes eléctricos y electrónicos, artículos deportivos.
2. Grandes aparatos
Su dimensión debe ser superior a 50 cm. Lavadoras, secadoras, lavavajillas, equipos de informática, aparatos de reproducción de sonido o imagen, equipos de música, herramientas eléctricas y electrónicas, juguetes, equipos deportivos y de ocio, productos sanitarios, instrumentos de vigilancia y control, máquinas expendedoras…
3. Intercambio de temperatura
Frigoríficos, congeladores, aparatos que suministran productos fríos, aparatos de aire acondicionado, bombas de calor, radiadores de aceite y otros aparatos de intercambio de temperatura que utilicen otros fluidos que no sean el agua.
4. Monitores y pantallas
Pantallas, televisores, marcos digitales para fotos con tecnología LCD, monitores, ordenadores portátiles, incluidos los de tipo «notebook».
5. Lámparas
Lámparas fluorescentes rectas, lámparas fluorescentes compactas, lámparas fluorescentes, lámparas de descarga de alta intensidad, incluidas las lámparas de sodio de presión y las lámparas de haluros metálicos, lámparas de sodio de baja presión y lámparas LED.
6. Equipos de informática pequeños
Teléfonos móviles, GPS, calculadoras de bolsillo, ordenadores personales, impresoras, teléfonos.
7. Paneles fotovoltaicos
Con una dimensión superior a 50 cm con silicio y paneles fotovoltaicos con teluro de cadmio.
Si te decides a sustituir algunos de tus viejos electrodomésticos, hazlo con el plan renove que consiste en que cada autonomía da ayudas para cambiar este tipo de aparatos electrónicos. Otra opción es poder donarlo a alguna asociación sin ánimo de lucro que alargará la vida útil del aparato y fomentarás la economía circular.
Fuentes:
https://www.ecolec.es/informacion-y-recursos/sobre-los-raee/