¿Dónde tirar fluorescentes?
¿Qué son los fluorescentes?
Las lámparas fluorescentes o tubos fluorescentes son utilizadas en un montón de lugares: garajes, cocinas, algunos baños…
Son tubos de vidrio que llevan electrodos en sus extremos. En su interior llevan pequeñas cantidades de argón y también vapor de mercurio. Lo más curioso de estos instrumentos es que la luz que originalmente irradian es ultravioleta roja, pero la superficie interna del vidrio está revestida con fósforos, que la transforman en luz blanca.
Teniendo estos compuestos tan particulares, el modo de tratarlos no es el convencional. Veámoslo.
¿Es reciclable?
¡Claro! Los fluorescentes están formados por materiales que podemos recuperar y reciclar. Además, algunos tienen en su interior pequeñas cantidades de mercurio que debemos evitar que se emitan al medioambiente.
Su reciclaje está regulado por la RAEE, la normativa que estipula la recogida sobre aparatos eléctricos y electrónicos y la gestión de sus residuos para garantizar su correcta gestión ambiental.
Tipo de contenedor
Debemos llevar nuestros fluorescentes al punto limpio. Allí se harán cargo de él y facilitarán el proceso de reciclado.
Además de poder desechar tus fluorescentes en los puntos limpios, en España contamos con el trabajo de Ambilamp, entidad encargada de la recogida y tratamiento de los residuos de lámparas y luminarias. Esta organización facilita el reciclaje de los fluorescentes a través de unos contenedores específicos situados en diferentes puntos de recogida:
- Distribuidores eléctricos destinado a profesionales del sector de la iluminación.
- Comercios y otros puntos de venta para usuarios domésticos. Muchas ferreterías, tiendas de iluminación y supermercados, que venden fluorescentes y lámparas de ahorro, disponen de pequeños contenedores para recoger estos residuos.
Puedes encontrar tu punto de recogida más cercano a través de este localizador de puntos de reciclado. ¡Desde Ecoembes te animamos a llevarlos!
¿Cómo se reciclan los fluorescentes?
Una vez los tubos son llevados a una planta especializada en su tratamiento, los pasos que se siguen para su reciclado son los siguientes:
En primer lugar, los fluorescentes pasan por una cinta transportadora en la cual se cortan los cabezales. Después pasan por un sistema de aspiración en el que se recoge el polvo para ser destilado posteriormente. El vidrio se tritura y se limpia para su reciclado posterior. Por otro lado, los cabezales también se trituran y se separan sus componentes metálicos.
Y quizás te preguntes qué se hace con el polvo… muy fácil: se destila y del mismo se obtiene mercurio puro. Interesante, ¿verdad?
¿Qué se hace con ello después?
Este es otro de esos productos de los cuales se obtienen distintos materiales. Son tan específicos que a veces se reutilizan para producir exactamente el mismo producto del que provienen. Otras veces, pueden usarse para cosas distintas.
El vidrio podrá ser usado para hacer nuevos envases y el mercurio muchas veces se utilizará para maquinaria o electrónica. Los metales pueden acabar en fundiciones y acerías y el plástico transformarse en los recicladores de plástico.
Ahora que hemos visto el proceso del reciclado de los fluorescentes, recuerda siempre llevarlos al punto limpio una vez hayas terminado de usarlos o se hayan estropeado. Fíjate en cuantas otras vidas podemos darles a nuestros objetos del día a día. ¡Sigamos reciclando!
Fuentes:
- http://www.ambilamp.es
- https://www.ecured.cu/L%C3%A1mpara_fluorescente
- https://www.recytrans.com/blog/que-hacer-con-tubos-fluorescentes/