Reciclar las cajas de madera de fruta. ¿Cómo se hace y dónde se tiran?

27/07/2018|Publicado por Ecoembes

Envases de madera para alimentación

Las cajas de madera para frutas y hortalizas tienen un uso muy normalizado en nuestro día a día. Este tipo de envases sirven para mostrar los productos de una forma natural en los comercios, sirviendo de carta de presentación. Además, su uso está creciendo debido a su funcionalidad y apariencia estética.

La madera es un material de embalaje muy valorado en el sector hortofrutícola por su fiabilidad, resistencia y rápido enfriamiento en cámara. Además, es un material de embalaje respetuoso con el medioambiente. La madera permite que los productos frescos mantengan su calidad durante más tiempo, reduciendo la necesidad de otros métodos de conservación.

Los envases de madera que dispongan del sello de calidad “GROW-Quality” están fabricados con madera de bosques y cultivos gestionados de forma sostenible, contribuyendo a la reducción del cambio climático. Por cada metro cúbico de madera se captura alrededor de 0,9 toneladas de CO2. Además, este certificado garantiza que el envase incorpora grapas imantables para facilitar su reciclaje. Esto asegura una menor huella de carbono en toda la cadena de producción y distribución.

Otro aspecto clave es la durabilidad de estos envases. A diferencia de otros materiales como el plástico, la madera no solo es resistente, sino que también es reparable, lo que extiende su vida útil. Esto reduce la necesidad de producción de nuevos envases, contribuyendo aún más a la sostenibilidad del sector. Además, la madera, al ser un material natural, no libera toxinas ni altera las propiedades organolépticas de los alimentos, lo que es crucial para mantener la calidad y seguridad de los productos alimenticios.

¿Las cajas de madera de fruta son reciclables?

¡Claro que sí! La madera tiene montones de usos y el reciclaje de materias primas es fundamental para la sostenibilidad. En España se generan grandes cantidades de residuos de madera que, si no se reciclasen, irían a parar a vertederos, aumentando la presión ambiental sobre el ecosistema.

Entonces, ¿dónde las tiramos? Los envases de madera o corcho utilizados para la distribución de frutas u hortalizas deben tirarse en el contenedor amarillo. Sin embargo, es importante verificar las normativas locales, ya que algunas regiones pueden tener puntos específicos de recolección para madera.

Es fundamental que el proceso de reciclaje de madera sea fomentado tanto por los consumidores como por las empresas. Al hacerlo, se contribuye a la economía circular, donde los productos al final de su vida útil son reutilizados o reciclados en lugar de ser desechados. Este enfoque no solo reduce la acumulación de residuos, sino que también disminuye la demanda de recursos naturales vírgenes, protegiendo nuestros bosques y ecosistemas.

¿Cómo es el proceso de reciclado?

El reciclaje de las cajas de madera es muy sencillo. Este proceso comienza compactando estos envases a través de prensas, asegurando que ocupen menos espacio en el transporte y facilitando su manejo. Una vez limpia de otros materiales, la madera se tritura o astilla. En esta misma operación se separan las partes metálicas adheridas mediante electroimanes, garantizando que solo quede madera pura para el siguiente paso.

Este proceso transforma este residuo en un material en masa limpio y menos voluminoso ¡listo para ser suministrado a industrias que lo requieran! Este material se puede utilizar en la fabricación de nuevos productos, contribuyendo a un ciclo de vida más sostenible y eficiente.

El reciclaje de madera también puede ser una fuente de energía renovable. La madera que no se reutiliza para fabricar nuevos productos puede ser convertida en pellets o briquetas, que sirven como biocombustible. Este uso de la madera como fuente de energía reduce la dependencia de combustibles fósiles, apoyando la transición hacia una energía más limpia y sostenible.

¿Con las cajas de madera recicladas se hace compost?

Tras el proceso de reciclaje, la madera de estas cajas se utiliza como compost para la agricultura y para la elaboración de tableros de aglomerado para muebles o construcción. Las no recicladas se usan como combustible en forma de pellets, una opción energética renovable y eficiente.

En cuanto a las astillas, tras una segunda trituración más fina, se utiliza como materia prima en la fabricación de otros subproductos de la madera, como briquetas para leña, serrín, y más. Este enfoque maximiza el uso de la madera, reduciendo el desperdicio y fomentando un uso más consciente de los recursos naturales.

Además, el compostaje de madera contribuye a la mejora del suelo, aumentando su fertilidad y capacidad para retener agua, lo que es esencial para la agricultura sostenible. El uso de compost de madera en la agricultura no solo reduce la necesidad de fertilizantes químicos, sino que también mejora la estructura del suelo, ayudando a prevenir la erosión y promover la biodiversidad.

Como ves, la vida de estas cajas es inmensa y, gracias al reciclaje, ¡prestan multitud de servicios! La transformación de madera reciclada en nuevos productos es una excelente manera de apoyar prácticas sostenibles y promover la economía circular.

Si quieres conocer el ciclo de vida completo de las cajas de madera, echa un vistazo al siguiente vídeo de FEDEMCO, la Federación Española del Envase de Madera y sus Componentes. El vídeo ofrece una visión detallada del proceso de fabricación, uso y reciclaje de estos envases, destacando su papel en la sostenibilidad ambiental.

Fuentes: