¿Cuántas veces se puede reciclar el vidrio? Descubre la verdad sobre su ciclo de vida

Es imposible decir un número concreto sobre cuántas veces se puede reciclar el vidrio, ya que se trata de un material del que podríamos decir que tiene un ciclo de vida infinito. Te contamos cómo es su proceso de reciclaje y cuáles son los beneficios de reciclar vidrio. Descubre cómo contribuir a la economía circular con un reciclaje responsable del vidrio.
Proceso paso a paso: ¿cómo se recicla el vidrio?
Existen diferentes fases en la cadena de reciclaje del vidrio. El proceso completo paso a paso sería el siguiente:
- Se deposita el vidrio usado en los contenedores de color verde (frascos, botellas, etc.) para iniciar el proceso de reciclaje.
- Se recoge en camiones el vidrio depositado en los contenedores para trasladarlo a la planta de tratamiento.
- El vidrio se deposita en cintas para separarlo de otros materiales y eliminar impurezas; se retiran tapas, tapones y restos de metal, plástico, cerámica o porcelana.
- Ya seleccionado, el vidrio es triturado con un sistema que no necesita agua.
- Una vez triturado, se eliminan restos opacos de otros materiales con la ayuda de máquinas con lectores ópticos.
De esta manera, el vidrio vuelve a convertirse en materia prima para generar nuevos envases. Esa materia prima recibe el nombre de calcín y es tratada en fábricas de envases o vidrieras para crear nuevos recipientes que llegan a nuestros hogares, a comercios o a restaurantes para iniciar de nuevo su proceso de reciclaje.
Beneficios ambientales del reciclaje de vidrio
El reciclaje de vidrio es una de las formas más sencillas de cuidar del medioambiente. Con el simple gesto de depositar nuestros envases de este material en un contenedor verde, podemos aportar numerosos beneficios:
- Evitamos la extracción de nuevas materias primas y la erosión y degradación del suelo.
- Disminuimos el crecimiento de los vertederos y en las propias empresas que compactan el vidrio, ya que ese material no se desecha sino que se reutiliza.
- Ahorramos energía en la fabricación de nuevos envases, pues apostamos por la reutilización y, además, el calcín necesita una temperatura de fusión inferior a la de otras materias primas como la arena o la caliza.
- Reducimos las emisiones de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera.
- Mejoramos la calidad del aire y del agua al reducir la contaminación.
En definitiva, reciclar vidrio es un gesto que permite ahorrar energía, recursos y emisiones de gases de efecto invernadero, además de mejorar la calidad del aire y del agua. Por tanto, es beneficioso tanto desde el punto de vista medioambiental como económico.
El reciclaje del vidrio: ¿un proceso infinito?
¿Cuántas veces se puede reciclar el vidrio? El vidrio es un material que mantiene el 100% de sus propiedades iniciales con independencia de la cantidad de veces que se recicle. Se puede decir, por tanto, que la cadena de reciclaje del vidrio es infinita, por lo que es el proceso que mejor ejemplifica la economía circular y la sostenibilidad.
Sí, aunque parezca ciencia ficción, el vidrio se puede reciclar infinitas veces, de ahí la importancia de comprometerse con el reciclaje de este material.
El vidrio es un material que puede ser reciclado constantemente sin perder su composición y propiedades, aunque para ser reciclado debe separarse primero.
Tipos de vidrio reciclable: ¿todo el vidrio puede reciclarse?
Es importante decir que el cristal y el vidrio son dos productos diferentes, pues el primero contiene dióxido de plomo y el segundo tan solo está compuesto por sílice. Esto significa que el vidrio es 100% reciclable de manera indefinida, pero no todo el cristal se puede reciclar. ¿Qué tipos de vidrio pueden reciclarse?
Vidrio de envases, botellas y más
Los contenedores verdes son los destinados al reciclaje de vidrio y en ellos se pueden depositar los siguientes elementos:
- Botellas de vidrio sin corcho o tapón (de licor, vino, cava, cerveza, agua…).
- Frascos de vidrio (perfumes, colonias, cremas…).
- Tarros de alimentos sin tapa (de conservas, mermeladas, vegetales…).
Cuando hablamos del vidrio que sí se puede reciclar, también nos referimos a los siguientes ejemplos, ¡pero cuidado, que no se depositan en el contenedor verde!:
- Vidrio empleado en edificación, proveniente de la demolición de edificios, aunque su recuperación es bastante complicada.
- Vidrio laminado, que se fabrica con la unión de dos o más hojas de vidrio unidas con láminas intermedias de polivinilo butiral (PVB).
- Otros vidrios como vasos, copas, monitores de TV, PC, etc., aunque no se pueden reciclar para fabricar nuevos envases.
- Residuos del proceso de reciclado de vidrio, que aunque no puede ser valorizable, sí se puede usar para la fabricación de nuevos productos.
Elementos que no deben ir al reciclaje de vidrio
Para optimizar el reciclaje de vidrio es fundamental saber qué elementos no deben depositarse en los contenedores verdes. Por ejemplo:
- Cerámica
- Porcelana
- Cristal de copas o vasos
- Bombillas
- Espejos
Todos ellos se deben llevar a un punto limpio. Es importante tener en cuenta que hay objetos que tienen una composición diferente al vidrio y esta puede resultar perjudicial para el proceso de reciclaje de nuevos envases.
Consejos para reciclar el vidrio de forma responsable
Dar el tratamiento adecuado al vidrio es un desafío, pues resulta muy complicado retirar todas las etiquetas de los envases, separarlos por colores o quitar los objetos ajenos a este material (como las tapas), que sería lo más correcto a la hora de reciclar este material. No obstante, el primer paso es depositar correctamente el vidrio en los contenedores verdes.
Como hemos dicho, vidrio no es igual que cristal y diferenciarlos puede ser complicado. Los vasos suelen estar hechos de vidrio, pero no siempre es así, y las copas suelen ser de cristal, pero también las hay de vidrio. ¿Cómo distinguirlas? Un truco es golpear el borde del vaso o la copa con un dedo, si el sonido que emite es corto, se trata de vidrio; si es largo, se trata de cristal. Pero, si no tienes buen oído, la cosa se complica.
Hay envases que generan confusión, como las bombillas, los espejos rotos o ventanas, los ceniceros o el menaje de porcelana. Todo esto no está hecho de vidrio y, por tanto, no debe depositarse en el contenedor verde.
Ten en cuenta los elementos que sí pueden reciclarse y los que no (ya hemos hablado de ello en apartados anteriores) y deposita en el contenedor verde los materiales correctos de la siguiente manera:
- Limpia los envases de vidrio antes de tirarlos: elimina líquidos o restos de comida y, si puedes, retira las etiquetas. Eso sí,no es necesario lavarlos con agua.
- Retira siempre las tapas y tapones.
- No tires elementos de otros materiales (cerámica, porcelana, cristal, bombillas, espejos, etc.). Llévalos a un punto limpio.
Además, ante la duda con tus envases, siempre puedes darles una segunda vida en casa, convirtiendo una botella en un jarrón decorativo para flores, por ejemplo. ¡Hay muchas formas de reusar el vidrio!